U.S. Department
of Health and Human Services
ACF
Administration for Children and Families
Memorando de Información
A: Todos los destinatarios de subvenciones de Head Start
Tema: Estrategias y recomendaciones para apoyar la salud mental
PROPÓSITO:
Este Memorando de información (IM, sigla en inglés) destaca las Normas de Desempeño del Programa Head Start y las estrategias relacionadas para integrar los apoyos de salud mental en todos los programas Head Start.
ANTECEDENTES:
Los programas Head Start, incluidos los programas preescolares, los programas Early Head Start, los programas para migrantes y estacionales, y los programas para indígenas estadounidenses y nativos de Alaska, tienen una larga historia de brindar servicios integrales junto con los servicios de educación temprana. Apoyan una cultura en todo el programa que promueve la salud mental y el bienestar social y emocional de los niños. La salud mental de los niños es fundamental para el bienestar familiar, el desarrollo saludable general de los niños y el éxito a largo plazo.1 En los últimos años, los programas Head Start han expresado la necesidad de recibir orientación sobre cómo ser más intencionales en la integración de los apoyos de salud mental (en inglés) en los programas. Esta necesidad es resultado de información que muestra un aumento en los problemas de comportamiento y desarrollo, un incremento en las tasas de rotación del personal y una disponibilidad limitada de servicios especializados de salud mental. Este IM proporciona estrategias de salud mental basadas en evidencia y recursos asociados que pueden ayudar a abordar estos desafíos como parte de un esfuerzo renovado de las agencias federales de financiamiento de la primera infancia a fin de integrar los apoyos de salud mental en los programas.
Para integrar los apoyos de salud mental de manera efectiva en los programas Head Start, es importante primero comprender y desestigmatizar lo que se entiende por "salud mental". La salud mental de los niños pequeños, a menudo denominada Salud mental en la primera infancia (ECMH, sigla en inglés), no es una enfermedad mental. En realidad, es lo mismo que el desarrollo y el bienestar social y emocional. Es la capacidad de un niño para expresar y regular emociones, construir relaciones de confianza, explorar y aprender, todo en el contexto cultural de la familia y la comunidad. Los enfoques de la ECMH deben apoyar el desarrollo de habilidades sociales y emocionales de todos los niños, además de proporcionar apoyos especializados para hasta el 20 por ciento de los niños menores de 5 años que experimentan dificultades sociales y emocionales. 2
Fortalecer el enfoque en la salud mental es particularmente apropiado dada la misión del programa Head Start de brindar servicios a los niños y familias más vulnerables y romper el ciclo de la pobreza. Las personas que viven en vecindarios con alto niveles de pobreza a menudo tienen menos acceso a recursos y apoyos de alta calidad en comparación con las personas que viven en vecindarios con bajos niveles de pobreza y, como resultado de esto, es más probable que tengan peores resultados de salud mental.3 Además, las familias de raza negra, indígenas y de color (BIPOC, sigla en inglés)4 y las familias en áreas remotas o rurales tienen menos acceso a servicios de salud mental y de ayuda por consumo de sustancias.5 Las familias BIPOC, incluidas las familias de comunidades tribales, se ven afectadas de manera desproporcionada por el estrés crónico resultante del racismo estructural y el trauma histórico, lo que restringe aún más el acceso a los servicios en los que pueden confiar.6
Los programas Head Start desempeñan un papel vital en el tratamiento de la ECMH y la reducción de las disparidades en la ECMH, ya que se centran en el niño en su totalidad y se asocian con las familias y las comunidades. Los esfuerzos centrados en la familia, en particular, garantizan que la salud mental de los niños continúe recibiendo apoyo a largo plazo, después de que los niños hagan la transición al jardín de infantes. Muchos programas Head Start ya han adoptado diversas estrategias para abordar la ECMH. Los programas apoyan el bienestar de la familia y el bienestar del personal, lo que garantiza que los cuidadores estén bien equipados para apoyar la ECMH. Estos, apoyan directamente al niño fortaleciendo las relaciones con los cuidadores receptivos, como los padres (en inglés) y el personal de la primera infancia (en inglés), que es la base de la ECMH. Brindan entornos estables y enriquecedores en los que los niños pueden aprender y practicar habilidades sociales y emocionales de manera segura, y se asocian con las familias para hacer lo mismo en casa. El personal de Head Start establece relaciones de confianza con las familias y los socios dentro de la comunidad para identificar y aprovechar los recursos. Estos pasos hacen que sea más probable que los apoyos de salud mental satisfagan las necesidades de las familias y marquen la diferencia.
ORIENTACIÓN:
Si bien existen muchas maneras en que se puede dar apoyo a la salud mental en los programas Head Start, es importante que los estos adopten un enfoque integral e integrado de salud mental en la primera infancia que promueva la salud mental de niños y adultos, evite que se desarrollen preocupaciones y apoye la identificación y remisión temprana de tratamientos cuando sea necesario.Brindar apoyo de salud mental en forma continua y homogénea7 garantiza que cada niño y familia reciba el nivel adecuado de atención. Esta forma continua y homogénea incluye lo siguiente:
- Promoción de la salud mental: un enfoque destinado a fortalecer los aspectos positivos de la salud mental y el bienestar y centrado en preparar a los niños y las familias para el éxito.
- Servicios y apoyos de prevención: un enfoque destinado a reducir la probabilidad de futuros trastornos en la población general o en las personas identificadas como en riesgo de presentar un trastorno.
- Acceso al tratamiento de salud mental: las intervenciones se realizan a personas que siguen estando en riesgo después de participar en servicios de prevención o que han sido diagnosticadas con un trastorno mental.
La Oficina de Head Start (OHS, sigla en inglés) continúa alentando enfáticamente a los destinatarios de las subvenciones a utilizar los fondos de mejora de la calidad disponibles para todos los destinatarios de las subvenciones de Head Start, Early Head Start, Head Start para indígenas estadounidenses y nativos de Alaska, Head Start para migrantes y trabajadores de temporada, y de asociaciones de Early Head Start con el Cuidado infantil a fin de apoyar estas estrategias e invertir en apoyos de salud mental en todas las funciones y áreas de servicio del programa. Las sugerencias de usos permitidos de los fondos para el mejoramiento de la calidad según se especifica en la Ley de Head Start se pueden encontrar en la página Aumento del financiamiento para Head Start en el AF 2023.
En el caso de las Oficinas de Colaboración Estatal de Head Start y los destinatarios que trabajan en estrecha colaboración con los estados, podría ser de interés revisar la guía del programa relacionada.
Estrategias y recomendaciones para apoyar la salud mental
Estas estrategias respaldan la calidad del programa y describen los recursos que pueden ayudar a los programas a cumplir con las Normas de Desempeño del Programa Head Start aplicables.
Aumentar la promoción de la salud mental
- Tener un enfoque en los determinantes sociales de la salud, o las condiciones en las que las personas nacen, crecen, viven, trabajan y envejecen, puede conducir a mejores resultados de salud mental y prevenir futuras enfermedades mentales. A fin de promover condiciones sociales que apoyen el bienestar familiar, como la seguridad familiar, la salud y la estabilidad económica, se alienta a los programas a desarrollar enfoques innovadores de dos generaciones que aprovechen las asociaciones comunitarias y aborden las necesidades prevalentes de los niños y las familias (45 CFR §1302.50(a-b)). Para lograrlo, los programas pueden:
- Crear asociaciones auténticas con las familias utilizando la Serie Desarrollo de asociaciones con las familias como guía. Los programas pueden apoyar la salud mental y el bienestar de la familia mediante el uso de la evaluación familiar y el proceso de asociación para ayudar a las familias con los factores que les producen más estrés en la vida.
- Actualizar el proceso de admisión del programa con las familias para incluir conversaciones específicas sobre la salud mental, tales como las percepciones de las familias sobre la salud mental y abordar la posible estigmatización. Incluir información sobre apoyos de salud mental en el programa, como servicios de consulta de salud mental y recursos y apoyos disponibles en la comunidad.
- Establecer reuniones formales e informales con las familias con la intención de apoyar la salud mental de la familia. Por ejemplo, dedique tiempo durante las conferencias de padres y maestros para discutir cómo les está yendo a las familias, cree un buzón para que los padres comuniquen discretamente sus necesidades al personal y dedique tiempo en cada reunión de padres a actividades de bienestar.
- Invite al consultor de salud mental a presentarse en los eventos del programa, como una "jornada de puertas abiertas" para explicar el compromiso del programa Head Start en apoyar la salud mental. Esta es una oportunidad para familiarizar a los padres con los servicios de salud mental disponibles para ellos, incluido el papel del consultor de salud mental y cómo se utiliza la consulta a lo largo del programa.
- Para promover el bienestar familiar, los programas deben colaborar con los padres de familia proporcionando servicios de apoyo a la educación en salud mental. Estos servicios incluyen oportunidades para que los padres aprendan sobre la atención saludable durante el embarazo y la etapa de posparto que abarca opciones de tratamiento de salud mental y de consumo de sustancias (45 CFR §1302.46(a)). Para lograrlo, los programas pueden:
- Ofrecer oportunidades para que las familias se conecten para hablar sobre el desarrollo de sus hijos, cómo están lidiando con posibles factores estresantes y qué recursos están utilizando. Cree un grupo de padres, ya sea virtualmente o en persona, que sirva como un espacio para que estos expresen sus emociones, pensamientos y sentimientos. Para obtener orientación sobre cómo facilitar esta actividad, consulte Dirigir las reuniones y los grupos de padres en línea.
- Proporcionar capacitación y oportunidades para que los padres aprendan sobre la salud, el bienestar y la salud mental de los niños (pueden ser capacitaciones presenciales, virtuales, recursos, folletos, etc.), así como el desarrollo de relaciones y entornos seguros, estables y enriquecedores. Por ejemplo:
- Solicitar al consultor de salud mental que brinde sesiones grupales de bienestar con los padres. En estas sesiones se incluye información sobre los recursos de la comunidad y cómo acceder a ellos.
- Invite a oradores de agencias de salud mental y consumo de sustancias para brindar charlas sobre salud mental y consumo de sustancias.
- Hable periódicamente con las familias sobre cómo brindarles apoyo para su propia salud mental y bienestar, por ejemplo mediante materiales educativos sobre cómo reducir el estrés y comprender la depresión.
- Para las mujeres embarazadas y las familias que esperan un bebé matriculadas en los servicios de Early Head Start, incluya un control de bienestar mental durante la visita del recién nacido que los programas proporcionan a cada madre y bebé dentro de las dos semanas posteriores al nacimiento del bebé (45 CFR §1302.80(d)). Estos controles de bienestar mental están dirigidos a los padres o miembros de la familia que cuidan al niño y pueden incorporarse a un control de salud diario. Considere la posibilidad de incorporar pruebas diagnósticas de la salud mental en adultos, incluida la depresión y el consumo de sustancias, con la orientación adecuada de un profesional de la salud mental.
- Para promover el bienestar del personal, los programas deben poner a disposición información sobre salud mental y bienestar con respecto a cuestiones que podrían afectar su desempeño laboral; a su vez, deben proporcionar al personal oportunidades programadas periódicamente para aprender sobre salud mental, bienestar y educación para la salud (45 CFR §1302.93(b)). Para lograrlo, los programas pueden:
- Implementar políticas, procedimientos y estrategias identificados para apoyar el bienestar del personal que se basen en los datos del programa, como los descritos en Fomento del bienestar de todo el personal de la fuerza laboral de Head Start, ACF-IM-HS-21-05). Es importante recopilar comentarios del personal sobre su bienestar y satisfacción laboral, así como estrategias de bienestar, para determinar si se necesitan ajustes o mejoras.
- Proporcionar a los líderes del programa una capacitación básica para apoyar la salud mental de la fuerza laboral, por ejemplo, a través de la Red Nacional de Estrés Traumático Infantil (NTCSN, sigla en inglés). La NTCSN ofrece recursos y capacitaciones sobre una amplia gama de temas, incluidas estrategias para prevenir, reconocer y abordar el estrés traumático secundario, que podr[ian experimentar el personal de Head Start que atiende a niños afectados por traumas.
- Considere la posibilidad de establecer comunidades de práctica o grupos de supervisión reflexiva que ayuden a los directores y gerentes a centrarse en la creación de entornos seguros y comunicaciones que transmitan al personal que es seguro expresarse y recibir apoyo en caso de que experimenten problemas de salud mental.
- Promover los servicios de asistencia a los empleados y crear una cultura para abordar el estigma de buscar ayuda por razones de salud mental. Concientizar a los empleados sobre los apoyos de salud mental gratuitos o de bajo costo disponibles, como los beneficios incluidos en los planes de seguro médico.
- A fin de promover el bienestar infantil, un programa debe asegurarse de que el personal, los consultores, los contratistas y los voluntarios implementen estrategias positivas para apoyar el bienestar de los niños (45 CFR §1302.90(c)(i)). Para facilitar la implementación de estrategias positivas, los programas pueden:
- Capacitar al personal, a consultores, contratistas y voluntarios para que tengan conocimientos básicos de estrategias adecuadas según el nivel de desarrollo a fin de apoyar comportamientos positivos. Dado que las expectativas de desarrollo y las estrategias adecuadas podrían diferir según la edad y las habilidades de desarrollo de un niño, el personal que trabaja con niños en edad preescolar también podrían beneficiarse de una comprensión básica de cómo apoyar a los bebés y niños pequeños.
- Asegurarse de que el personal entienda que seguir la iniciativa de los niños en las actividades de juego estructurado es una forma impactante de comprender las habilidades de desarrollo de los niños, identificar y ofrecer atención positiva a sus fortalezas y practicar habilidades de autorregulación en un entorno controlado.
- Garantizar que los entornos de aprendizaje estén diseñados para apoyar la autorregulación de los niños. Esto podría incluir la creación de "espacios acogedores" que sean claramente visibles para la supervisión de un adulto donde los niños puedan ir si se sienten abrumados. Del mismo modo, se pueden crear espacios con actividades o materiales sensoriales que funcionen como lugares para expresar energía. Este tipo de espacios están diseñados para que los maestros puedan seguir observando al niño o los niños que se encuentran allí, al mismo tiempo que les brindan los apoyos necesarios para autorregularse.
- Asociarse con las familias para comprender el desarrollo, el estilo de comunicación, las fortalezas y el temperamento de cada niño con el fin de establecer rutinas predecibles, estrategias de transición y expectativas de comportamiento apropiadas para el nivel de desarrollo de los niños en el programa.
Aumentar los servicios y apoyos de prevención
- Para apoyar el desarrollo social y emocional continuo de los niños, los programas deben proporcionar apoyos para una gestión eficaz del aula y entornos de aprendizaje positivos; prácticas docentes de apoyo; y estrategias para apoyar a los niños con conductas desafiantes y otros problemas sociales, emocionales y de salud mental (45 CFR §1302.45(a)). Para lograrlo, los programas pueden:
- Implementar un enfoque de participación de todo el equipo multidisciplinario que trabaje en conjunto en su programa para apoyar la salud mental de los niños.Este equipo puede estar compuesto por personas que ya trabajan con el niño o la familia en todas las disciplinas. El beneficio de contar con un equipo de profesionales con múltiples perspectivas (es decir, salud mental, primera infancia, educación especial, servicio familiar, salud, nutrición, etc.) es que garantiza el enfoque más integral para apoyar las necesidades de los niños y sus familias.
- Por ejemplo, considere formas de integrar enfoques centrados en la prevención, como el Modelo piramidal (en inglés), con apoyos de salud mental, tales como las consultas de salud mental.
- Busque orientación directa de un profesional de la salud mental o del desarrollo infantil para asegurarse de que los hallazgos de la evaluación del desarrollo requerida en la disposición 45 CFR §1302.33, incluidas las evaluaciones sociales y emocionales, se utilicen al hacer una remisión para determinar si el niño es elegible para los servicios a través de IDEA o la sección 504 de la Ley de Rehabilitación. Mientras los programas esperan una evaluación de elegibilidad y posibles servicios, los programas pueden considerar un enfoque individualizado a fin de apoyar comportamientos positivos y enseñar nuevas habilidades.
- Revise el currículo educativo de su programa para asegurarse de que ofrezca oportunidades de aprendizaje social y emocional adecuadas, incluidas experiencias de aprendizaje planificadas intencionalmente para ayudar a practicar habilidades de autorregulación. Si nota que muchos niños en el grupo necesitan apoyo para el desarrollo social y emocional, dedique algún tiempo a incorporar intencionalmente más de aquellas experiencias y actividades en su currículo que apoyen estas habilidades. Incluya estas actividades y apoyos en sus rutinas diarias y revíselos según sea necesario para asegurarse de que los niños desarrollen habilidades en esta área.
- Implementar un enfoque a nivel de sistemas que permita regular a los adultos, tal como el sistema "Tap-In/Tap-Out"8 cuando un miembro del personal educativo se sienta frustrado, abrumado o desregulado. Esta estrategia permite que un miembro del personal educativo convoque a otro miembro del personal de una lista predeterminada para que cubra la clase. El primer miembro del personal educativo sale de la clase y participa de estrategias que le permitan acceder a un estado de calma antes de volver al entorno de aprendizaje.
- Implementar un enfoque de participación de todo el equipo multidisciplinario que trabaje en conjunto en su programa para apoyar la salud mental de los niños.Este equipo puede estar compuesto por personas que ya trabajan con el niño o la familia en todas las disciplinas. El beneficio de contar con un equipo de profesionales con múltiples perspectivas (es decir, salud mental, primera infancia, educación especial, servicio familiar, salud, nutrición, etc.) es que garantiza el enfoque más integral para apoyar las necesidades de los niños y sus familias.
- La consulta de salud mental para bebés y niños de la primera infancia (IECMHC, sigla en inglés) es un enfoque basado en la prevención. Los consultores de salud mental trabajan con los líderes, el personal y las familias de Head Start para apoyar el desarrollo social y emocional saludable de los niños. Los destinatarios de las subvenciones han compartido que puede ser difícil conseguir consultores de salud mental, especialmente en las zonas rurales. Algunas estrategias para fomentar el acceso a las consultas de salud mental incluyen lo siguiente:
- Alentar al personal existente a utilizar los beneficios educativos, tales el apoyo para el pago de matrícula y cuotas educativas en pos de la mejora de competencias profesionales del consultor de salud mental.Estas y otras estrategias se describen en la disposición ACF-IM-HS-22-06 Estrategias para estabilizar la fuerza laboral de Head Start.
- Comunicarse con organizaciones de salud mental y otros programas para la primera infancia a fin de identificar posibles socios para los servicios de consulta de salud mental. Por ejemplo, pregunte a otros programas locales de Head Start o de la primera infancia, programas de visitas domiciliarias y oficinas estatales o tribales de cuidado y educación de la primera infancia cómo encuentran consultores de salud mental. Pregúnteles a los pediatras locales, a las clínicas de salud comunitarias y a los hospitales a los que remiten a niños y adultos para que reciban servicios de salud mental. Luego de identificar posibles socios, comuníquese con ellos para orientarlos sobre el papel de la consulta de salud mental en los programas Head Start y explore posibles colaboraciones.
- Priorizar la búsqueda de un profesional de la salud mental que esté familiarizado con las familias de su programa o comunidad. Su programa Head Start puede ayudarlos a aprender sobre el desarrollo infantil, el cuidado grupal, la cultura de su programa, las HSPPS relevantes y el IECMHC.
- Considerar la posibilidad de implementar enfoques tales como la visita de telesalud o la consulta a distancia, especialmente en las zonas rurales, mientras se realizan esfuerzos para desarrollar la capacidad de consulta de salud mental en persona.9
- Consulte el mapa interactivo de consultores (en inglés) del sitio IECMHC.org.
- Para garantizar que los consultores de salud mental participen en actividades centradas en la prevención, los programas deben asegurarse de que el consultor de salud mental colabore, como mínimo, con los requisitos enumerados en la disposición 45 CFR §1302.45(b). Para lograrlo, los programas pueden:
- Proporcionar oportunidades de desarrollo profesional para el personal durante la incorporación y periódicamente luego de esta. Por ejemplo, el curso del iPD sobre la Consulta de salud mental para bebés y niños en la primera infancia puede garantizar que todo el personal comprenda que el IECMHC es una manera de aumentar la capacidad de los adultos para apoyar el bienestar social y emocional del niño, en lugar de un enfoque de intervención o tratamiento directo.
- Utilizar la experiencia del consultor de salud mental a nivel programático, además de asesorar a nivel de niños, familias y aulas específicas. Por ejemplo, el consultor de salud mental puede ayudar a los líderes y al personal del programa a explorar estrategias para mejorar los sistemas que apoyan el bienestar del personal. También pueden ayudar a diseñar políticas y procedimientos para todo el programa relacionados con los apoyos de salud mental, tales como la disciplina positiva o las prácticas de detección y evaluación.
Acceso a servicios de salud mental
- Los programas deben crear asociaciones comunitarias para facilitar el acceso a servicios de salud mental adicionales según sea necesario (45 CFR §§1302.45(a)(4), 1302.53(a)(2), 1302.80(c)). Para lograrlo, los programas pueden:
- Consultar con su Comité Asesor de Servicios de Salud sobre las oportunidades locales y las posibles asociaciones. Identificar los fondos de subvenciones disponibles en su comunidad local que están designados para apoyar la salud mental en la primera infancia. Por ejemplo:
- Asociarse con las Clínicas Comunitarias Certificadas de Salud Conductual (CCBHC, sigla en inglés) locales. Las CCBHC están diseñadas para garantizar el acceso a una atención integral coordinada de la salud conductual. Las CCBHC están obligadas a atender a cualquier persona que solicite atención para la salud mental o por consumo de sustancias, incluida la atención apropiada para el nivel de desarrollo de niños y jóvenes, independientemente de su capacidad de pago, lugar de residencia o edad.
- Aprovechar a los trabajadores de salud comunitarios, los navegadores familiares, los promotores y los especialistas a fin de reducir el estigma de la salud mental y brindar apoyo a las familias que navegan por los sistemas de salud mental y otros sistemas que abordan los determinantes sociales de la salud.
- Utilizar recursos que ofrezcan experiencia en prácticas de salud mental basadas en la cultura, tales como asociarse con curanderos tribales para conectar a las familias con las formas tradicionales de curación.
- Establecer asociaciones con colegios y universidades locales que puedan brindar servicios de salud mental con escala variable de precios a través de sus clínicas de capacitación en salud mental. Una escala variable es una estructura de tarifas flexible o un sistema que requiere el pago en función de la capacidad de pago de cada cliente.
- Facilitar el acceso comunitario (en inglés) a actividades de enriquecimiento que puedan proteger y promover la salud mental de los niños y las familias (es decir, actividades deportivas, eventos culturales, organizaciones religiosas, mercados de agricultores y grupos de juego).
- Evaluar las barreras para obtener servicios de salud mental (en inglés) y proporcionar apoyos basados en esta evaluación para facilitar el acceso. Ejemplos de esto podrían incluir brindar transporte desde el programa a las clínicas o proporcionar a las familias espacios privados equipados con la tecnología adecuada para acceder a los servicios de salud mental a distancia.
- Consultar con su Comité Asesor de Servicios de Salud sobre las oportunidades locales y las posibles asociaciones. Identificar los fondos de subvenciones disponibles en su comunidad local que están designados para apoyar la salud mental en la primera infancia. Por ejemplo:
Estas estrategias de salud mental basadas en la evidencia pueden ayudar a los programas Head Start a integrar intencionalmente los apoyos de salud mental en todo el programa. Pueden abordar los desafíos que enfrentan los programas, tales como los problemas de comportamiento y desarrollo, el cansancio del personal y la disponibilidad limitada de servicios especializados de salud mental. El apéndice adjunto incluye recursos más específicos para respaldar estas recomendaciones.
La Oficina de Head Start (OHS, sigla en inglés) continuará trabajando con los programas para apoyar la salud mental de los niños, las familias y el personal de los programas Head Start. Dirija cualquier pregunta sobre el contenido de este MI a su oficina regional de OHS.
Gracias por todo lo que hacen en nombre de los niños y las familias.
Atentamente,
/ Khari M. Garvin/
Khari M. Garvin
Director
Oficina de Head Start
Notas al pie
2. Comité del Consejo Nacional de Investigación y el Instituto de Medicina. Preventing mental, emotional, and behavioral disorders among young people: progress and possibilities (Prevención de trastornos mentales, emocionales y conductuales en jóvenes: avances y posibilidades). Washington, DC: National Academies Press; 2009.
3. Brauner, C. B., y Stephens, C. B. (2006). Estimating the prevalence of early childhood serious emotional/behavioral disorders: Challenges and recommendations (Estimación de la prevalencia de trastornos emocionales o conductuales graves en la primera infancia: desafíos y recomendaciones). Informes de salud pública, 121(3), 303-310.
4. Rafla-Yuan, E., Moore, S., Carvente-Martinez, H., Yang, P. Balasuriya, L., Jackson, K., McMickens, C., y Ropbles-Ramamurthy, B. (2022). Striving for equity in community mental health: Opportunities and challenges for integrating care for BIPOC youth (Luchar por la equidad en la salud mental comunitaria: oportunidades y desafíos para integrar la atención de los jóvenes BIPOC). Clínicas psiquiátricas para niños y adolescentes de América del Norte, 31(2), 295-312.
5. Morales, D. A., Barksdale, C. L., y Beckel-Mitchener, A. C. (2020). A call to action to address rural mental health disparities (Un llamado a la acción para abordar las disparidades en la salud mental de zonas rurales). Revista de ciencias clínicas y traslacionales, 4(5), 463-467.
6. Winters M-F. Black Fatigue: How Racism Erodes the Mind, Body, and Spirit (Fatiga de raza negra: cómo el racismo erosiona la mente, el cuerpo y el espíritu). 1ª ed. Berrett-Koehler Publishers; 2020. Mental-Health-Facts-for-American-Indian-Alaska-Natives.pdf (psychiatry.org) (en inglés)
(Hechos sobre salud mental para indígenas estadounidenses y nativos de Alaska) Gone, J. P., & Trimble, J. E. (2012). American Indian and Alaska Native mental health: Diverse perspectives on enduring disparities (Salud mental de los indígenas estadounidenses y nativos de Alaska: diversas perspectivas sobre las disparidades duraderas). Revista anual de psicología clínica, 8, 131-160.
7. Purgato M, Uphoff E, Singh R, Thapa Pachya A, Abdulmalik J, van Ginneken N (2020). Promotion, prevention and treatment interventions for mental health in low- and middle-income countries through a task-shifting approach (Intervenciones de promoción, prevención y tratamiento de la salud mental en países de bajos y medianos ingresos a través de un enfoque de transferencia de tareas). Epidemiology and Psychiatric Sciences (Epidemiología y Ciencias Psiquiátricas) 29, e150, 1–8. https:// doi.org/10.1017/S204579602000061X
8. Venet, A. S. (2019, 13 de septiembre).The evolution of a trauma-informed school (La evolución de una escuela con atención orientada al trauma). Edutopia.
9. Resumen de políticas de servicios de salud mental para niños | CSELS | Salud Rural | CDC.
Terry-Leonard et al (2022). Consulta de salud mental en primera infancia: Breve informe de adaptaciones en el entorno virtual de aprendizaje. ECMHCvirtualAdaptations_v6.pdf (iecmhc.org) (en inglés)
« Descargo de responsabilidad sobre las traducciones al español