Morder es un comportamiento común pero molesto de los niños pequeños. Es importante que los padres lo aborden cuando suceda. Esta hoja informativa recoge consejos para los padres y el personal del programa sobre cómo entender mejor los problemas relacionados con morder.
Cuando un niño muerde a otro niño
Intervenga inmediatamente entre el niño que mordió y el niño mordido. Mantenga la calma, no reaccione de forma exagerada, no grite ni dé una explicación larga.
Utilice su voz y expresión para mostrar que morder no es aceptable.Mire a los ojos del niño y diga calmadamente pero con firmeza: "No me gusta cuando muerdes a las personas". Para un niño con un lenguaje más limitado, simplemente diga "No muerdas a las personas". Muestre cómo el comportamiento del mordedor afecta a la otra persona. "Lo lastimaste y él está llorando". Anime al niño que fue mordido para que le diga al mordedor, "Me lastimaste". Anime al niño que mordió para que ayude al otro niño trayendo una compresa de hielo, etc.
Ofrezca al niño mordido confort y primeros auxilios.Lave la piel con agua tibia y jabón. Observe las precauciones generales si hay sangrado. Aplique una compresa de hielo o un paño frío para ayudar a prevenir la hinchazón. Si el niño mordido es un invitado, cuéntales a los padres lo que sucedió. Sugiera que un proveedor de atención de salud vea al niño mordido si la piel está lesionada o si hay signos de infección (enrojecimiento o hinchazón).
Cómo prevenir que los niños muerdan
Refuerce el comportamiento deseado.Observe y reconozca cuándo le gusta lo que hace su hijo, especialmente cuando muestre empatía o comportamiento social, como dar palmaditas a un niño que llora, ofrecer turnos con un juguete o abrazar con cuidado. No etiquete, humille ni aísle a un niño que muerde.
Desaliente el juego que implica morder "simulando" o que parece demasiado brusco y fuera de control. Ayude al niño a hacer conexiones con otros.
¿Por qué los niños muerden y qué podemos hacer?
Los niños muerden por muchas razones diferentes, así que para responder con eficacia es mejor tratar de averiguar por qué lo hacen.
Si su niño experimenta mordiendo inmediatamente dígale "no" en una voz firme y dele una variedad de juguetes para tocar, oler y probar y anime la exploración sensorial-motriz.
Si su hijo tiene incomodidad en la dentición, proporcione juguetes para la dentición fríos o alimentos seguros y masticables.
Si su hijo se está independizando, brinde oportunidades para tomar decisiones apropiadas para su edad y tener cierto control (el pan o la galleta, la bola amarilla o azul), y fíjese y brinde atención positiva a medida que se desarrollan nuevas habilidades de autoayuda e independencia.
Si su hijo usa los músculos de maneras nuevas, proporcione una variedad de materiales de juego (duros/blandos, ásperos /lisos, pesados/livianos) y planifique una gran cantidad de juegos activos en el interior y exterior.
Si su hijo está aprendiendo a jugar con otros niños, intente guiar el comportamiento si parece difícil (tome la mano del niño y diga: "Toca a Jorge suavemente, eso le gusta") y refuerce el comportamiento pro-social (como turnarse con los juguetes o dando palmaditas a un niño que llora).
Si su hijo se siente frustrado al expresar sus necesidades y deseos, diga lo que está tratando de comunicar ("te enojas cuando Ari toma tu camioneta" o "quieres que te preste atención").
Si su hijo se siente amenazado por situaciones nuevas o cambiantes, como un padre que regresa al trabajo, un bebé nuevo o padres que se separan, brinde cuidados especiales y sea tan cálido y tranquilizador como sea posible y ayúdelo a hablar sobre sentimientos incluso cuando él o ella dice algo como "Odio a mi nuevo bebé".
- Consulte con un profesional si su hijo se porta mal por un estrés inusual.
- Si el niño sigue mordiendo durante varias semanas o no le preocupan las consecuencias, busque ayuda profesional. Es inusual que un niño en edad preescolar (3-5 años) siga mordiendo y deben evaluarlo para saber si existen preocupaciones de desarrollo.
Última actualización: June 3, 2024