U.S. Department
of Health and Human Services
ACF
Administration for Children and Families
Memorando de Información
A: Concesionarios de Head Start y Early Head Start; administradores del Fondo para el Cuidado y el Desarrollo Infantil (CCDF)
Tema: Ayuda a los niños y las familias que están experimentando violencia doméstica o de pareja
Octubre es el Mes Nacional de la Sensibilización sobre la Violencia Doméstica. Para hacer énfasis en la importancia de los programas y servicios que se centran en el tema de la violencia doméstica, la Administración para Niños y Familias (ACF) dedica este mes a actualizar los anteriores Memorándums de Información (IM) y otros documentos que ha expedido sobre políticas relacionadas con la violencia doméstica, para asegurarse de que los proveedores de servicios humanos y de salud que cuentan con el apoyo de la ACF tengan la capacidad de reconocer el impacto de la violencia doméstica, de responder de manera eficaz con información y estrategias fundamentadas y de vincular a las familias de manera segura con los servicios relacionados con la violencia doméstica.
Este memorándum proporciona a los programas de Head Start y concesionarios de CCDF información actualizada sobre los efectos que tienen los actos de violencia cometidos por una pareja en las familias con niños muy pequeños y las formas en que pueden ayudar los programas de educación en la primera infancia y las agencias estatales y locales de cuidado infantil y otros sistemas afines.
Dada la magnitud del problema de la exposición de los niños a la violencia, incluido el hecho de que la violencia doméstica y el maltrato infantil suelen coincidir, no cabe duda de que la Oficina de Cuidado Infantil y la Oficina Nacional de Head Start prestan servicios a los niños y familias afectados por la violencia. Estos son algunos datos clave sobre la violencia doméstica y la violencia de pareja.
- El término “violencia de pareja” describe el daño físico, sexual o psicológico provocado por una pareja o cónyuge actual o previo. Este tipo de violencia puede ocurrir entre las parejas heterosexuales o parejas del mismo sexo, y no es necesario que exista intimidad sexual. La violencia de pareja puede variar en su frecuencia y gravedad. Esta violencia se suele presentar en un espectro que va desde un golpe que puede alcanzar o no a la víctima hasta golpizas graves1.
- La violencia doméstica es la segunda causa de muerte de las mujeres embarazadas, y entre el 25 y el 50 por ciento de las madres adolescentes son víctimas de violencia de pareja antes, durante o justo después de su embarazo.2
- Presenciar agresiones familiares es uno de los abusos más comunes que experimentan los niños pequeños (de 2 a 5 años de edad). Otras formas comunes de abuso son la agresión por parte de hermanos y la intimidación física.3
- En una proporción que fluctúa entre el 30 y el 60 por ciento de las familias en las que se presenta el abuso infantil o la violencia doméstica, ambos fenómenos coinciden.4
Es muy posible que los niños experimenten ellos mismos la violencia; sin embargo, incluso cuando no los lesionan directamente, el hecho de haber estado expuestos a incidentes traumáticos puede provocarles dificultades sociales, emocionales y de conducta.5 Se ha observado a menudo que los niños expuestos a la violencia doméstica con frecuencia manifiestan una amplia gama de problemas que incluyen la exteriorización de problemas de conducta, la falta de destrezas interpersonales y problemas psicológicos y emocionales como depresión y trastorno por estrés postraumático.6 Además, un estudio de niños en edad preescolar de familias de bajos ingresos realizado en Michigan concluyó que los niños expuestos a violencia doméstica en el hogar son más propensos a tener problemas de salud como alergias, asma, dolores de cabeza y estómago frecuentes y letargo generalizado.7
Lo que deben hacer los programas y proveedores de educación de la primera infancia para ayudar
Es fundamental que los trabajadores que presten servicios de cuidado infantil y el personal de Head Start estén preparados para trabajar con estos niños y familias y guiarlos hacia los servicios que necesitan. Los proveedores y administradores de programas cuidado infantil pueden apoyar a los niños y las familias en los momentos de estrés proporcionándoles a los padres los números de las líneas telefónicas de atención inmediata y otra información sobre la violencia doméstica. El personal de Head Start y de programas de cuidado infantil puede remitir a los interesados al sitio web de la ACF para las coaliciones de los estados y territorios contra la violencia doméstica a fin de identificar los datos necesarios para entrar en contacto con las coaliciones contra la violencia doméstica en cada estado y cada territorio y los enlaces respectivos. Cada coalición ofrece capacitación y asistencia técnica completas sobre los múltiples problemas que afectan la seguridad y el bienestar de las víctimas. http://www.acf.hhs.gov/programs/fysb/resource/dvcoalitions
Lo que deben hacer los programas y proveedores de educación de la primera infancia para ayudar
Es fundamental que los trabajadores que presten servicios de cuidado infantil y el personal de Head Start estén preparados para trabajar con estos niños y familias y guiarlos hacia los servicios que necesitan. Los proveedores y administradores de programas cuidado infantil pueden apoyar a los niños y las familias en los momentos de estrés proporcionándoles a los padres los números de las líneas telefónicas de atención inmediata y otra información sobre la violencia doméstica. El personal de Head Start y de programas de cuidado infantil puede remitir a los interesados al sitio web de la ACF para las coaliciones de los estados y territorios contra la violencia doméstica a fin de identificar los datos necesarios para entrar en contacto con las coaliciones contra la violencia doméstica en cada estado y cada territorio y los enlaces respectivos. Cada coalición ofrece capacitación y asistencia técnica completas sobre los múltiples problemas que afectan la seguridad y el bienestar de las víctimas. http://www.acf.hhs.gov/programs/fysb/resource/dvcoalitions
La fuerza laboral que trabaja en la educación en la primera infancia está compuesta actualmente por cerca de 1 millón de maestros y encargados del cuidado de niños que operan en centros de atención, 1 millón de maestros y encargados del cuidado de niños que operan en hogares y otros 2.7 millones de maestros y encargados del cuidado de niños que operan en hogares y que no reciben remuneración.8 Esta fuerza de trabajo consta en gran medida de mujeres, y las mujeres se ven afectadas desproporcionadamente por la violencia doméstica. Por tanto, la información sobre los servicios y programas adecuados debe estar disponible tanto para los empleados como para las familias. Por ejemplo:
- Los programas de Head Start y Early Head Start deben divulgar la información sobre los números de las líneas telefónicas locales de atención inmediata o los números de los programas locales de intervención contra la violencia doméstica, de manera directa o en espacios públicos que sean frecuentados por el personal y las familias.
- Se insta a los administradores estatales de CCDF a que compartan esta información con los proveedores de cuidado infantil y los programas de educación de la primera infancia, por ejemplo, distribuyéndola entre los organismos que ofrecen recursos y servicios de remisión y las agencias de cuidado infantil para que las divulguen entre sus redes de proveedores de cuidado infantil.
- Los administradores de CCDF también pueden incorporar la sensibilización sobre la violencia doméstica en las actividades de asistencia técnica y capacitación que realizan con los proveedores de cuidado infantil.
Exhortamos al personal programático y administrativo clave a que establezca alianzas con las coaliciones y con otras agencias y organizaciones de servicios humanos afines para informarles a los empleados locales de Head Start y de programas de cuidado infantil sobre lo que pueden hacer para ayudar a los niños y las familias afectadas por la violencia doméstica. Head Start, los administradores, las redes y los programas de cuidado infantil pueden colaborar con organizaciones como las coaliciones estatales contra la violencia doméstica y los proveedores locales de servicios relacionados con la violencia doméstica y las agresiones sexuales, con quienes prestan servicios de defensoría legal, los proveedores de atención médica, los programas de albergue, los proveedores de servicios de vivienda transitoria o de largo plazo, los servicios de salud mental o programas de intervención para personas que cometen agresiones. Estos proveedores pueden ofrecerles servicios directos a las familias y los niños o importantes servicios de capacitación durante el trabajo que se pueden diseñar par que se ajusten a los roles profesionales específicos del personal de Head Start y de programas de cuidado infantil. En particular, las alianzas con los programas contra la violencia doméstica pueden brindar oportunidades de capacitación conjunta, entrenamiento para la resolución de problemas, valoración de los casos de violencia doméstica y establecimiento de protocolos de remisión con programas locales que combaten la violencia doméstica.
La fuerza laboral que trabaja en la educación en la primera infancia está compuesta actualmente por cerca de 1 millón de maestros y encargados del cuidado de niños que operan en centros de atención, 1 millón de maestros y encargados del cuidado de niños que operan en hogares y otros 2.7 millones de maestros y encargados del cuidado de niños que operan en hogares y que no reciben remuneración.8 Esta fuerza de trabajo consta en gran medida de mujeres, y las mujeres se ven afectadas desproporcionadamente por la violencia doméstica. Por tanto, la información sobre los servicios y programas adecuados debe estar disponible tanto para los empleados como para las familias. Por ejemplo:
- Los programas de Head Start y Early Head Start deben divulgar la información sobre los números de las líneas telefónicas locales de atención inmediata o los números de los programas locales de intervención contra la violencia doméstica, de manera directa o en espacios públicos que sean frecuentados por el personal y las familias.
- Se insta a los administradores estatales de CCDF a que compartan esta información con los proveedores de cuidado infantil y los programas de educación de la primera infancia, por ejemplo, distribuyéndola entre los organismos que ofrecen recursos y servicios de remisión y las agencias de cuidado infantil para que las divulguen entre sus redes de proveedores de cuidado infantil.
- Los administradores de CCDF también pueden incorporar la sensibilización sobre la violencia doméstica en las actividades de asistencia técnica y capacitación que realizan con los proveedores de cuidado infantil.
Exhortamos al personal programático y administrativo clave a que establezca alianzas con las coaliciones y con otras agencias y organizaciones de servicios humanos afines para informarles a los empleados locales de Head Start y de programas de cuidado infantil sobre lo que pueden hacer para ayudar a los niños y las familias afectadas por la violencia doméstica. Head Start, los administradores, las redes y los programas de cuidado infantil pueden colaborar con organizaciones como las coaliciones estatales contra la violencia doméstica y los proveedores locales de servicios relacionados con la violencia doméstica y las agresiones sexuales, con quienes prestan servicios de defensoría legal, los proveedores de atención médica, los programas de albergue, los proveedores de servicios de vivienda transitoria o de largo plazo, los servicios de salud mental o programas de intervención para personas que cometen agresiones. Estos proveedores pueden ofrecerles servicios directos a las familias y los niños o importantes servicios de capacitación durante el trabajo que se pueden diseñar par que se ajusten a los roles profesionales específicos del personal de Head Start y de programas de cuidado infantil. En particular, las alianzas con los programas contra la violencia doméstica pueden brindar oportunidades de capacitación conjunta, entrenamiento para la resolución de problemas, valoración de los casos de violencia doméstica y establecimiento de protocolos de remisión con programas locales que combaten la violencia doméstica.
The National Domestic Violence Hotline
1-800-799-SAFE (7233) (Línea telefónica nacional de atención para casos de violencia doméstica)
TTY: 1-800-787-3224
http://www.thehotline.org/
La línea opera las 24 horas, los 7 días de la semana y está disponible en más de 170 idiomas por medio de servicios de interpretación. Ofrece una respuesta inmediata a las víctimas de violencia doméstica en situaciones de crisis y un sencillo sistema de remisión a programas comunitarios en todo el país.
Recursos del Departamento de Salud y servicios Humanos para niños, jóvenes y padres víctimas de abusos
Promising Futures: Prácticas óptimas para la atención de niños, jóvenes y padres que sufren la violencia doméstica
http://promising.futureswithoutviolence.org
Este nuevo sitio Web que sirve para desarrollar capacidades fue concebido por la organización Futures without Violence (Futuro sin violencia) para ayudar a los programas que luchan contra la violencia doméstica a mejorar sus servicios para los jóvenes (desde el nacimiento hasta los 18 años) que hayan experimentado violencia doméstica y para ofrecer acceso a una base de datos de intervenciones fundamentadas en los resultados de estudios y prácticas prometedoras para la atención de los jóvenes expuestos a la violencia doméstica.
Children and Domestic Violence Fact Sheet Series
http://nctsn.org/content/resources
(Serie de hojas de datos sobre la violencia doméstica y la violencia contra menores de edad) por la National Child Traumatic Stress Network (red nacional sobre el estrés traumático infantil) y Domestic Violence Collaborative Group (2013) (grupo de colaboración contra la violencia doméstica)
Esta serie de 10 hojas de datos se creó para los padres cuyos hijos han sido víctimas de violencia doméstica. Los materiales analizan las experiencias y las necesidades de estos niños y sus familias y ofrecen educación que les brinde resilencia y ayude en su recuperación.
Healthy Moms, Happy Babies: A Train the Trainers Curriculum (Mamás sanas, bebés felices: currículo de capacitación para instructores) sobre violencia doméstica, coerción reproductiva y niños expuestos a la violencia, publicado por Futures Without Violence
http://www.futureswithoutviolence.org/healthy-moms-happy-babies-train-the-trainers-curriculum
Este currículo se creó para dotar a los programas de visita a los hogares de herramientas para ayudar a las mujeres y niños que viven en hogares en los que se presenta la violencia doméstica. Este currículo basado en investigaciones incluye presentaciones en PowerPoint con anotaciones del presentador, preguntas para discusiones, videos, dramatizaciones y otros ejercicios, así como una bibliografía.
Recursos de las comunidades y para las comunidades con necesidades culturales específicas
National Indigenous Women’s Resource Center, Inc. (NIWRC)(Centro Nacional de Recursos para Mujeres Indígenas, Inc.)
www.niwrc.org
El NIWRC fortalece la capacidad de respuesta a la violencia doméstica de las tribus de indios estadounidenses y nativos de Alaska (AIAN), nativos de Hawaii, así como organizaciones tribales y de hawaianos nativos.
Institute on Domestic Violence in the African American Community (IDVAAC)(Instituto sobre Violencia Doméstica en la comunidad afroamericana
http://www.idvaac.org
El IDVAAC se centra en las circunstancias y las experiencias singulares de los afroamericanos que buscan recursos y soluciones relacionados con los abusos y los actos de violencia doméstica en su comunidad.
Asian & Pacific Islander Institute on Domestic Violence (APIIDV) (Instituto sobre la Violencia Doméstica para Asia y las Islas del Pacífico)
www.apiidv.org
El APIIDV brinda liderazgo y capacitación para los defensores, evaluadores y mediadores sobre las actividades apropiadas para las gestiones competentes de carácter cultural y de género.
Casa de Esperanza y la Red Nacional de Latinas para Familias y Comunidades Saludables (NLN)
www.casadeesperanza.org
Casa de Esperanza/NLN se esfuerza en crear respuestas eficaces para erradicar la violencia y promover las relaciones saludables en las familias y las comunidades latinas. Han creado una variedad de herramientas para mejorar la competencia cultural en los servicios para las familias latinas afectadas por la violencia doméstica.
Rogamos que dirija sus preguntas sobre este memorándum a:
Kiersten Beigel
Especialista en asociaciones con la familia y la comunidad
Oficina Nacional de Head Start
202-260-4869
Carolyn Dean, Ed.M.
Asistente especial de la directora
Oficina de Cuidado Infantil
202-260-4985
Shawndell Dawson
Especialista principal de programas
Oficina de Servicios a la Familia y los Jóvenes, División de Prevención de la Violencia Doméstica y Servicios Afines
202-205-1476
Gracias por su labor en favor de los niños y las familias.
/ Linda Smith /
Linda Smith
Subsecretaria adjunta
y enlace interdepartmental para el desarrollo en la primera infancia
Administración para Niños y Familias
/ Ann Linehan /
Ann Linehan
Directora en funciones
Oficina Nacional de Head Start
/ Shannon Rudisill /
Shannon Rudisill
Directora
Oficina de Cuidado Infantil
/ Marylouise Kelley /
Marylouise Kelley
Directora
Oficina de Servicios para la Familia y los Jóvenes, División de Prevención de la Violencia Doméstica y Servicios Afines
1 Saltzman LE, Fanslow JL, McMahon PM, Shelly GA. Intimate partner violence surveillance: uniform definitions and recommended data elements. Version 1.0 Atlanta (GA): Centers for Disease Control and Prevention. National Center for Injury Prevention and Control: 2002.
2 Leiderman, Sally & Cair. Almo, Interpersonal Violence and Adolescent Pregnancy: Prevalence and Implications for Practice and Policy, Center for Assessment and Policy Development and the National Organization on Adolescent Pregnancy, Parenting, and Prevention (2001).
3 Finkelhor, D., Turner, H., Ormrod, R., Hamby, S., & Kracke, K. (October 2009). Children’s exposure to violence: A comprehensive national survey [PDF, 881KB]. Washington, DC: U.S. Department of Justice, Office of Juvenile Justice and Delinquency Prevention and the Centers for Disease Control and Prevention.
4 Edleson, J.L. (1999). The overlap between child maltreatment and woman battering. Violence Against Women, 5, 134-154.
5 Nelson HD, Nygren P, McInerney Y, Klein J. (2004). Screening women and elderly adults for family and intimate partner violence: a review of the evidence for the U.S. Preventive Services Task Force. Annals of Internal Medicine 140(5):387–96.
6 Carlson. B.E. (2000). Children Exposed to Intimate Partner Violence: Research Findings and Implications for Intervention. Trauma Violence and Abuse, 1(4), 321-342.
7 Graham-Berman, SA & Seng, J., Violence Exposure and Traumatic Stress Symptoms as Additional Predictors of Health Problems in High-Risk Children, JOURNAL OF PEDIATRICS 146(3): 309-10 (2005).
8 Targeting Early Childhood and School Age Workforce Investments [PDF, 120KB]-2014. National Center on Child Care Professional Development Systems and Workforce Initiatives
« Descargo de responsabilidad sobre las traducciones al español